Una experiencia deliciosa y familiar

Durante nuestra estancia, disfrutamos de excelente comida en el restaurante. Los niños se divirtieron en el parque infantil y la habitación dúplex fue perfecta para nuestra familia. Sin embargo, notamos que el desayuno podría ofrecer más variedad.

La ubicación cercana a las pistas es excelente.

El hotel tiene un ambiente acogedor y tranquilo, ideal para desconectar. Las vistas desde la habitación son espectaculares, especialmente al amanecer.

La ducha no tragaba bien y hubo ruidos constantes de la cisterna, lo cual fue molesto durante nuestra estancia.

El hotel tiene un parque infantil que mantuvo a los niños entretenidos. La ducha no tragaba bien y había ruidos de la cisterna. Comida muy buena y llena de opciones. Se pueden hacer excursiones de senderismo por la zona, ideales para disfrutar de la naturaleza.

Las habitaciones tienen unas vistas increíbles, que realmente elevan la experiencia. Las camas son cómodas y el lugar tiene esa atmósfera relajante que se disfruta tras un día de actividades al aire libre.

La falta de aire acondicionado fue un inconveniente en verano, haciendo que las noches fueran incómodas. La ducha no tragaba bien y la cisterna del W.C. hacía ruido continuo, lo que no ayudó para nada a la tranquilidad de la habitación. El desayuno, aunque suficiente, carecía de variedad y podría mejorar añadiendo opciones como yogur o zumo natural.

buenas experiencias pero con detalles a mejorar

Disfruté de vistas impresionantes desde mi habitación, lo que realmente realzó mi estancia. La atención del personal fue excepcional, siempre amables y dispuestos a ayudar. Los platos del restaurante también destacaron, especialmente los saborosos mejillones.

El desayuno podría ofrecer más opciones para ser verdaderamente memorable.

El hotel avet tiene una ubicación espectacular, a solo cinco minutos de la estación de esquí de Port del Comte, ideal para los amantes de las montañas. La atención del personal fue sobresaliente, siempre dispuestos a ayudar. La comida fue excelente, con opciones sabrosas en cada comida. Además, el hotel cuenta con un gimnasio y un jacuzzi para relajarse después de un día activo.

100% recomendable

Descubrí este hotel durante un fin de semana y fue una experiencia increíble. La comida, especialmente los mejillones, fue lo mejor. Las habitaciones duplex son perfectas para descansar y los niños pueden jugar tranquilos. Un lugar donde seguro volveré.

Disfruté de la ubicación cercana a las pistas de esquí, ideal para un fin de semana en la nieve. La comida fue excelente, especialmente los platos locales que ofrecen. La atención del personal fue muy amable, se notaba que estaban allí para ayudar.

Las habitaciones no cuentan con aire acondicionado, lo que puede ser un problema en verano. Además, el desayuno podría tener más variedad y opciones frescas como fruta.

Ubicación excelente, a solo cinco minutos de la estación de esquí. Habitación amplia y cómoda con vistas increíbles. Atención del personal muy amable, siempre dispuestos a ayudar. Comida deliciosa y abundante, ideal para disfrutar después de un día activos.

La ubicación del hotel es excelente, a solo cinco minutos de la estación de esquí de Port del Comte, lo que resulta muy conveniente para los amantes del deporte invernal. Las habitaciones familiares son amplias y ofrecen un altillo, ideal para mantener a los niños cómodos. La comida del restaurante es realmente buena, con opciones deliciosas para las comidas. Me encantó la zona de juegos, que mantuvo a mis hijos entretenidos durante nuestra estancia. Pero, hubo algunos inconvenientes. La ducha no funcionó correctamente, lo que fue un poco frustrante. También, la cisterna del W.C. hacía bastante ruido durante la noche. El desayuno podría mejorar en variedad. solo había algunas opciones limitadas. Aunque el personal fue amable, a veces tardaron en atendernos, sobre todo en los momentos de mayor afluencia.

La habitación que tuvimos era dúplex, bastante amplia y perfecta para la familia. Las camas eran cómodas y el baño estaba bien cuidado. A los niños les encantó el parque infantil y la zona de juegos. Sin embargo, la ducha no funcionaba del todo bien, lo que fue algo frustrante. Y la cisterna hacía ruido, lo cual fue un poco molesto durante la noche. En general, la habitación tenía un buen ambiente, pero esos detalles restaron un poco a nuestra experiencia.

Excelente experiencia en la montaña

Tuvimos una estancia maravillosa, con comida deliciosa y un personal extremadamente amable. Las habitaciones son cómodas y amplias, ideales para descansar después de un día de actividades. No se pierdan los mejillones del restaurante, son sencillamente espectaculares. Recomendamos hacer senderismo en los alrededores.